miércoles, 17 de junio de 2009

Los peores Óscar




Por motivos que no vienen a cuento, me estoy poniendo al día de las películas de Hollywood candidatas a los últimos premios de la Academia, los Óscar, y puedo decir, sin temor a equivocarme, que, tras el visionado de 'Frost contra Nixon' y 'El Luchador', los Óscar 2009 fueron los peores en mucho tiempo, y no sólo porque se atrevieran a premiar a Penélope Cruz.




Voy por partes. 'Frost contra Nixon' es una estupenda obra dirigida por un incapaz director de cine que responde al nombre de Ron Howard. Howard ya demostró en 'Una mente maravillosa' que elige los emplazamientos de cámara con el mismo criterio que yo relleno el boleto del Euromillón: puro y simple azar. Ron Howard es incapaz de reconocer la cumbre dramática de la historia que tiene entre manos y cuando ha alcanzado un momento fantástico, gracias a la increíble interpretación de Frank Langella como Nixon, va y se saca de la manga un final de esos para tontos que le obliga a uno a plantearse si realmente los americanos son tontos o lo son sus directores de cine. En el caso que me ocupa, me decanto claramente por la segunda opción.




'El Luchador' es una de esas pelis tonti-progres que gustan mucho a los gafapastas. Contar no es que cuente nada, más bien resulta un documental al estilo de National Geographic sobre la mutación de Mickey Rourke en una vaca loca, pero cuanta sensibilidad y cuanta tontería hay en en cada uno de sus planos. El primer hecho importante a nivel narrativo, el primer punto de giro, llega en el minuto 30 y durante la primera media hora larga de la película hemos estado viendo a Rourke en una situación que ya nos imaginamos desde los títulos de crédito. Una película redudante, previsible, colección de tópicos y que provoca que servidor se plantee si no hubiese sido mejor que los productores hubiesen donado el dinero al Real Madrid, después de la pasta que se han gastado con CR7 cualquier ayuda es buena. Que pena que un director tan cañero como Aronofsky haya descubierto, a estas alturas, que de mayor quiere ser artista y no simplemente uno de los realizadores más interesantes del panorama cinematográfico.




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